Como consecuencia de la deforestación y la degradación, cada año se pierden en el país unas 150 mil hectáreas de bosques, un área equivalente a diez veces la superficie de la Provincia Constitucional del Callao.La Defensora del Pueblo, Beatriz Merino, presentó el Informe “La Política Forestal y la Amazonía Peruana: Avances y obstáculos en el camino hacia la sostenibilidad”, el cual presenta los resultados de una supervisión realizada a 81 oficinas pertenecientes al Ministerio de Agricultura, al Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado, al Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre, y a ocho Gobiernos Regionales ubicados en el ámbito de la Amazonía (Amazonas, Huánuco, Junín, Loreto, Madre de Dios, Pasco, San Martín y Ucayali).
De las oficinas supervisadas, 38 están dedicadas al control forestal, las cuales cuentan, en promedio, con tres integrantes. Además, solo tres de ellas declararon que poseen camionetas en buen estado, y solo una mantiene un bote operativo.
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