Lima, 20 / 12 / 2007
Una Comitiva de nativos de Boca Chichireni llegaron a Lima para entrevistarse con el presidente de la República y el jefe del Consejo de Ministros, para exigir acciones en contra del narcotráfico del Valle del Río Apurímac y Ene, asentada hace 27 años en el distrito de Pangoa, provincia de Satipo.
“Lo que hemos visto conveniente es fortalecer la seguridad, debido a la presencia del narcoterrorismo en la zona, las autoridades tanto las autoridades, como policiales, no han tomado una decisión fuerte, por lo que va aumentando cada vez más. La zona se va volviendo peligrosa y las comunidades se sienten debilitadas. Por ello demando que se tome cartas en este asunto, declaró Dany Huanca, representante de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP).
El dirigente solicitó que el Plan VRAE también llegue a las comunidades, porque existe una ausencia por parte del Estado. “El Gobierno no va a querer ver mas sangre derramada de pueblos indígenas, y debe reflexionar sobre esta situación, porque los integrantes de las comunidades van a defender sus demandas ante las autoridades. Por ello nos reuniremos con el Ministerio del Interior, de Defensa de Agricultura y de la Defensoría del Pueblo”, declaró.
En el distrito de Pangoa, transitan muy abiertamente los llamados “mochileros”, que son personas cargadores de droga, que trasladan liquido de ácidos químicos, y con su accionar conquista cada vez mas espacios de territorios indígenas, por lo que presenta una inseguridad total.
Fuente: Noticia Local - Ideele