Durante la temporada de verano, visitar las playas o piscinas se convierte no solo en una opción para la diversión, sino también para contraer infecciones de diverso tipo, especialmente oculares, debido a nuestra poca higiene y al grado de contaminación que se presenta en estos lugares.
Cuando un niño presenta párpados enrojecidos, picazón y ardor en los ojos tras haber acudido a una piscina o playa contaminada, es posible que se encuentre pasando por un proceso de conjuntivitis, el cual requiere tratamiento médico inmediato, indicó el doctor Jorge Hernani, oftalmólogo del SISOL.
La conjuntivitis explicó, se caracteriza por presentar ojo rojo, escozor, secreciones mucopurulentas de tonalidad amarillenta o verdosa, y en cantidades variables, las mismas que por lo general se hacen más evidentes durante las mañanas, al despertar.
Fuente: Noticia Local – Prensa Sisol