Buscan silenciarlo. La difusión de los denominados “potoaudios” reveladoras de la postulante pepecista a la alcaldía de Lima, Lourdes Flores, le podría costar una querella judicial al conductor del programa “El Francotirador”, Jaime Bayly, según advirtió con vehemencia el vicepresidente del Partido Popular Cristiano (PPC), Juan Carlos Eguren, lugarteniente de la candidata.
Tras expresar su ira por la difusión de las grabaciones, Eguren afirmó: “Seguimos viendo la asquerosidad y cómo el señor Bayly ensucia la palabra y la profesión de periodista, metiéndose en conversaciones absolutamente privadas sin ninguna relevancia pública. Tendrá que responder ante la justicia”.
Eguren dijo que, así como los delincuentes que roban tienen que ir presos, hay otro tipo de acciones que merecen otro tipo de sanciones y el periodista debe asumir sus responsabilidades.
Indicó que los abogados del PPC están trabajando las ampliaciones de la denuncia ante las vías civil y penal. “No voy a adelantar (más) pero cada quien tendrá lo que le corresponde”, aseguró.
De otro lado, Eguren argumentó que no tiene nada de malo el contenido de uno de los audios en que se escucha una conversación entre Lourdes Flores y el líder del PPC, Felipe Osterling.
Jaime Bayly defendió la difusión de los audios alegando que están referidos a asuntos de “interés nacional”, ya que en ellos se escucha al pepecista Xavier Barrón sugerir a Flores conversar con los directivos de la encuestadora Ipsos-Apoyo para que cambien los resultados en los que Susana Villarán había pasado al primer lugar en la carrera por el sillón municipal de Fuerza Social.
Hasta el momento, Barrón está en cura de silencio y no aclara sus palabras, pese a que si consumó su acción habría cometido una acción dolosa, al tratar de desvirtuar una medición sobre la opinión ciudadana.
En otro momento, en el audio se oye a la candidata expresar iracunda que le importa un comino la alcaldía de Lima y que no le interesa la elección. En un momento llega a decir: “Métanse la alcaldía al poto”.
El ex decano del Colegio de abogados de Lima, Walter Gutiérrez, muy cercano al oficialismo, sostuvo que la difusión y el uso de audios provenientes de la interceptación telefónica, no están protegidos por el derecho a la libertad de expresión.
Tras expresar su ira por la difusión de las grabaciones, Eguren afirmó: “Seguimos viendo la asquerosidad y cómo el señor Bayly ensucia la palabra y la profesión de periodista, metiéndose en conversaciones absolutamente privadas sin ninguna relevancia pública. Tendrá que responder ante la justicia”.
Eguren dijo que, así como los delincuentes que roban tienen que ir presos, hay otro tipo de acciones que merecen otro tipo de sanciones y el periodista debe asumir sus responsabilidades.
Indicó que los abogados del PPC están trabajando las ampliaciones de la denuncia ante las vías civil y penal. “No voy a adelantar (más) pero cada quien tendrá lo que le corresponde”, aseguró.
De otro lado, Eguren argumentó que no tiene nada de malo el contenido de uno de los audios en que se escucha una conversación entre Lourdes Flores y el líder del PPC, Felipe Osterling.
Jaime Bayly defendió la difusión de los audios alegando que están referidos a asuntos de “interés nacional”, ya que en ellos se escucha al pepecista Xavier Barrón sugerir a Flores conversar con los directivos de la encuestadora Ipsos-Apoyo para que cambien los resultados en los que Susana Villarán había pasado al primer lugar en la carrera por el sillón municipal de Fuerza Social.
Hasta el momento, Barrón está en cura de silencio y no aclara sus palabras, pese a que si consumó su acción habría cometido una acción dolosa, al tratar de desvirtuar una medición sobre la opinión ciudadana.
En otro momento, en el audio se oye a la candidata expresar iracunda que le importa un comino la alcaldía de Lima y que no le interesa la elección. En un momento llega a decir: “Métanse la alcaldía al poto”.
El ex decano del Colegio de abogados de Lima, Walter Gutiérrez, muy cercano al oficialismo, sostuvo que la difusión y el uso de audios provenientes de la interceptación telefónica, no están protegidos por el derecho a la libertad de expresión.
Fuente: Noticia Local - La Primera
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