En el kilómetro 254 de la carretera Fernando Belaunde Terry, sector El Salao, a 25 minutos de Bagua Grande, un aproximado de 200 metros de la carpeta asfáltica cayó al río Utcubamba, dejando incomunicadas a la costa con la selva peruana. Dicho deslizamiento se inició la madrugada del lunes, siendo más crítica la situación la madrugada de ayer martes.
El daño fue producido por el embalsamiento de las aguas del río Utcubamba, que desde el año 2011 viene erosionado la zona y causando serias grietas en la carretera, pero lamentablemente la concesionaria IIRSA NORTE solo puso algunos parches en la carretera, en vez de construir una variante de la vía, para así evitar que más de 800 unidades móviles junto a sus pasajeros queden varados en ambas márgenes.
Tras el derrumbe, los pasajeros y dueños de las unidades varadas, abrieron un pequeño pase en la zona por donde solo podían filtrarse pequeños autos. Luego, la concesionaria abrió un pase mayor por donde empezaron a circular pesadas unidades, pero al ver que la vía continuaba cayéndose, las obras rudimentarias fueron paralizadas, con la intención de hacer una vía alterna para el tránsito de todos los vehículos, resaltando que dicha trocha no es nada segura, debido a que las lluvias, el embalsamiento y los deslizamientos en el lugar continúan.
Asimismo, ante la presencia de la prensa, decenas de pasajeros y transportistas protestaron por la demora de la concesionaria IIRSA NORTE en realizar los trabajos en la vía afectada; además, señalaron que los maquinistas llegaron antes de las seis de la mañana para empezar a trabajar, pero lamentaron que no podían hacerlo por carecer de las órdenes de los ingenieros de IIRSA NORTE, que llegaron a la ocho de la mañana de ayer.
Finalmente, pasadas las dos de la tarde de ayer martes, un tractor de oruga y una retroexcavadora lograron abrir una trocha alterna por donde pudieron pasar y seguir con su destino las diferentes unidades móviles. Se desconoce si la concesionaria hará un estudio de suelo en la zona, para poder construir una carretera alterna tan igual como se hizo en el sector El Aserradero.
Fuente: Noticia Local - CNR
El daño fue producido por el embalsamiento de las aguas del río Utcubamba, que desde el año 2011 viene erosionado la zona y causando serias grietas en la carretera, pero lamentablemente la concesionaria IIRSA NORTE solo puso algunos parches en la carretera, en vez de construir una variante de la vía, para así evitar que más de 800 unidades móviles junto a sus pasajeros queden varados en ambas márgenes.
Tras el derrumbe, los pasajeros y dueños de las unidades varadas, abrieron un pequeño pase en la zona por donde solo podían filtrarse pequeños autos. Luego, la concesionaria abrió un pase mayor por donde empezaron a circular pesadas unidades, pero al ver que la vía continuaba cayéndose, las obras rudimentarias fueron paralizadas, con la intención de hacer una vía alterna para el tránsito de todos los vehículos, resaltando que dicha trocha no es nada segura, debido a que las lluvias, el embalsamiento y los deslizamientos en el lugar continúan.
Asimismo, ante la presencia de la prensa, decenas de pasajeros y transportistas protestaron por la demora de la concesionaria IIRSA NORTE en realizar los trabajos en la vía afectada; además, señalaron que los maquinistas llegaron antes de las seis de la mañana para empezar a trabajar, pero lamentaron que no podían hacerlo por carecer de las órdenes de los ingenieros de IIRSA NORTE, que llegaron a la ocho de la mañana de ayer.
Finalmente, pasadas las dos de la tarde de ayer martes, un tractor de oruga y una retroexcavadora lograron abrir una trocha alterna por donde pudieron pasar y seguir con su destino las diferentes unidades móviles. Se desconoce si la concesionaria hará un estudio de suelo en la zona, para poder construir una carretera alterna tan igual como se hizo en el sector El Aserradero.
Fuente: Noticia Local - CNR