Lima, 29 / 01 / 2008
Los integrantes del grupo Colina celebraron -con torta y cervezas- el asesinato de 15 personas en el vecindario limeño de Barrios Altos, perpetrado el 3 de noviembre de 1991.
Así lo reveló Pedro Guillermo Supo Sánchez, ex integrante del referido escuadrón de aniquilamiento, quien rinde su testimonio en el marco de la décimo sétima audiencia en el proceso contra el ex jefe de Estado, Alberto Fujimori, por violaciones a los derechos humanos.
Ante las preguntas del fiscal adjunto Avelino Guillén, el ex agente narró que los miembros de Colina desarrollaron hasta ocho ensayos en la playa La Tiza, al sur de Lima, "en seco" (sin armas), incluso la misma tarde de la matanza.
Según Supo Sánchez, inicialmente les informaron que el operativo tenía por fin capturar a los simpatizantes de Sendero Luminoso (SL); sin embargo, una vez puesto en marcha, se dieron cuenta que el objetivo de la incursión era ubicar, identificar y eliminar a los presuntos terroristas.
Así mismo, relató que, luego de perpetrado el crimen, el destacamento volvió a la playa La Tiza y fue allí que se increparon entre ellos por la muerte de un menor de edad. Sin embargo, contó que ese mismo lugar celebraron con pastel y cervezas la misión cumplida.
En otro pasaje de su intervención, Supo aseveró que los miembros de Colina eran "bautizados" al interior del destacamento con la asignación de un asesinato que era ordenado por su líder, Santiago Martin Rivas.
En su caso, su "bautizo" en el grupo Colina se produjo en junio de 1992 con la matanza de seis de los integrantes de la familia Ventocilla, en el caserío de Balconcillo, en el norte chico, en la que también participaron otros miembros de este escuadrón.
Agregó que, durante los operativos de aniquilamiento que Colina llevaba a cabo, los miembros del grupo portaban picos y palas. Las herramientas eran usadas para cavar las fosas en donde enterraban los cuerpos de sus víctimas, que era sepultados cubiertos de abundante cal.
Fuente: Noticia Local - Agencias - CNR